En el cementerio municipal de la ciudad santafesina, el músico Mario Millán Medina recibió un sentido homenaje, tras lo cual sus restos mortales son trasladados a la provincia de Corrientes, donde mañana serán depositados en un panteón en el paraje goyano Colonia Porvenir, donde nació.
En el cementerio municipal de Santa Fe, el músico Mario Millán Medina recibió un sentido homenaje con la presencia de familiares, amigos y artistas. Los restos de quien dejó un gran legado al sentir chamamecero, son trasladados desde esa ciudad litoraleña rumbo al Departamento Goya, donde serán depositados este sábado 31 de mayo en un Panteón en el cementerio de Colonia Porvenir, zona rural donde nació el 25 de Mayo de 1914, una obra construida por decisión del intendente de Goya, Mariano Hormaechea.
Tras la ceremonia de tributo en la necrópolis santafesina, su hija Virginia Millán Medina dialogó con los cronistas santafesinos que hicieron la cobertura informativa del acto. «Soy agradecida a las autoridades municipales, a los músicos que lo acompañaron toda su vida, a la gente que supo escuchar lo que él quiso transmitir, la identidad, su sentir, su realidad», señaló.
UN AMANTE DE LA VIDA
Al pedirle una descripción de su padre, la hija afirmó: «Fue un artista, un amante de la vida, pasó en cada rincón de la Mesopotamia, del Litoral, de su Corrientes, lugar donde se nutría para cada gira». En otro orden, agregó que «con Antonio Tarragó Ros somos amigos, hermano chamamecero; él siempre tiene la particularidad de abonar para nuestra cultura, por eso no nos extrañó que se involucre para este hecho, de llevar los restos de mi padre a su suelo natal».
La Municipalidad de Santa Fe, en el cementerio de esa ciudad, rindió el homenaje al «Molina Campos del Chamamé», antes del traslado de sus restos a tierra goyana.
Mario Millán Medina nació en colonia El Porvenir, Departamento Goya y falleció en Rosario, provincia de Santa Fe el 6 de noviembre de 1977. Conocido como El Cantor Chamamecero, fue un músico, compositor, cantante y guitarrista de chamamé y música litoraleña. Reconocido como uno de los principales compositores de canciones litoraleñas, compuso casi 200, varias de ellas incorporadas al cancionero popular, entre las que se destacan El rancho’e la Cambicha, La guampada, El sargento Sapo, El colimba, entre otras. Sus letras se caracterizaron por el sentido del humor, creando una línea que sería continuada y que es conocida como chamamé festivo. Por el contenido costumbrista de sus composiciones fue llamado también como el Molina Campos del Chamamé.