Fernando Magno, vicepresidente de la Confederación de Pymes Constructoras, analizó en Canal E los últimos datos del INDEC que mostraron un aumento del 1,6% en el costo de la construcción durante julio. Según precisó, el índice propio de la entidad (APIMECO) reflejó una suba del 3,2%, lo que revela un desfasaje con el oficial.
“Lo importante es que se rompe la línea de 16 meses consecutivos de baja de precios y se inicia una nueva tendencia ascendente, lo cual preocupa, sobre todo en un contexto preelectoral”, advirtió Magno.
Materiales que empujan la suba
El dirigente explicó que el rubro de materiales fue el que más incidió en la suba de costos. “El hierro redondo de construcción aumentó 12,9%, el ladrillo hueco un 5% y los ascensores un 7%. Es un reacomodamiento de los principales insumos”, detalló.
Impacto de la paralización de la obra pública
Magno fue contundente sobre la situación del sector: “Nuestra actividad es de las más golpeadas por la desaparición de la obra pública nacional”. Según indicó, muchas empresas se volcaron a licitaciones provinciales, que hoy se encuentran sobrecompetidas y con precios a la baja.
En paralelo, el sector privado también está frenado. “La construcción está cara en dólares y la gente prefiere esperar el resultado electoral antes de tomar decisiones. Hoy el costo de un metro cuadrado de un edificio multifamiliar está en 1.409 dólares”, puntualizó.
El freno del crédito
El aumento de tasas también agravó la situación. “Pasamos de tasas del 34% al 39% a más del 70% en cuestión de semanas. Esto duplica el costo del dinero en un momento en que municipios y provincias están demorando pagos. Para las pymes, es insostenible”, explicó Magno.
Según el dirigente, tanto consumidores como empresas esperan un eventual alivio postelectoral en las tasas para reactivar la demanda de crédito.
Proyecciones y empleo en riesgo
De acuerdo con el índice de APIMECO, la variación interanual ya acumula un 31% de suba, y el incremento desde enero alcanza el 16%. “Si la tendencia se mantiene, el año cerrará con una inflación sectorial del 30 al 35%”, proyectó Magno.
En materia laboral, advirtió que ya se perdieron más de 100.000 empleos formales y que muchos trabajadores migraron al cuentapropismo o al monotributo. “La actividad de las pymes constructoras hoy está al 50%. Estamos en modo supervivencia”, concluyó.